El DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER Y SUS CIFRAS

Por Regina Vargas

Aún teniendo el mismo nivel de escolaridad y laborando el mismo número de horas, las mujeres reciben menor salario que los hombres con el mismo puesto de trabajo, es decir, ganamos 8.8 menos que los hombres, de acuerdo al Inegi, y 13% menos, asegura la Organización Internacional del Trabajo.

Aunque de los más de 103. 3 millones de habitantes, 51.3 somos mujeres y 48.7 hombres, su presencia en la fuerza del trabajo es de 49.1 por ciento, mientras que los hombres representan el 74.3.

En algunos grupos ocupacionales, como el de funcionarios públicos y privados o el de supervisores industriales, el incremento salarial de las mujeres debe ser mayor al 30% para alcanzar la equidad.

La creciente participación de las mujeres mexicanas en la política ha sido fundamental para remover viejos conceptos sobre la propia mujer.

Aunque sigue siendo reducida nuestra participación en los cargos de elección popular en los ámbitos de gobierno municipal, estatal y federal, la presencia femenina mantiene un crecimiento sostenido.

Y ello se refleja en que la participación de las mujeres como presidentas municipales se ha mantenido entre el 3% y 4% en los

últimos años. En 2006, 3.5% de los municipios o delegaciones del país eran presididos por una mujer.

Los estados de Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Colima, Querétaro Arteaga y Tabasco

no cuentan actualmente con ninguna mujer que sea presidenta municipal.

Por cada cuatro diputados hay una mujer en la actual LX Legislatura federal, esto es 116 de un total de 500 curules, equiparable a la composición que presenta el Senado, con 24 legisladoras entre 128 senadores.

En 1979, Griselda Alvarez fue a primera gobernadora, por el estado de Colima y desde esa fecha, pocas han sido, las mujeres que gobiernen alguna entidad, como fue el caso de Beatriz Paredes, Tlaxcala; Dulce María Sauri, Yucatán; Rosario Robles, jefe de gobierno del DF y ahora están Amalia García en Zacatecas e Ivonne Ortega en Yucatán.

En el caso de las dirigentes sindicales su número es también reducido. En el Sindicato Nacional de Trabajadores Educación, Elba Esther Gordillo, en la FSTSE, no rebasa de 5; en la UNT, su presencia no es mayoritaria.

En la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), pese a ser un gremio mayoritario, sólo dos mujeres han sido secretarías generales: Alejandra Barrales y actualmente, Lizzete Clavel Sánchez.

El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) reconoció que dependiendo de la actividad hay rubros en donde es muy grave la discriminación salarial hacia las mujeres, ya que para alcanzar la equidad en el pago la remuneración de las trabajadoras debe aumentarse de manera considerable.

Citó que en minería, construcción, electricidad, gas y agua la segregación hacia las mujeres es muy alta, por lo que es necesaria una redistribución de las ocupaciones que desempeñan para alcanzar equidad en la participación económica.

Los indicadores con enfoque de género del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), todavía reflejan grandes desigualdades sobre la participación activa de las mujeres en la vida económica y política e indican que hay mucho por avanzar en el mundo para ampliar las oportunidades de las mujeres en general en tales ámbitos.

La posición relativa de México en el Informe Mundial sobre Desarrollo Humano 2006-2007 fue la número 53 de entre 177 países, tomando en cuenta la desigualdad de los adelantos entre mujeres y hombres y comparando el salario medio femenino y masculino y el porcentaje de hombres y mujeres en la población económicamente activa.

En cuanto a los índices de desarrollo relativo al género por Entidad Federativa, en donde se toman en cuenta la esperanza de vida, la tasa de alfabetización de adultos, la tasa de matriculación de educación primaria a licenciatura, el ingreso estimado en dólares del trabajo de hombres y mujeres, así como los escaños parlamentarios, la participación en cargos de funcionarios o directivos, la participación en puestos de profesionistas y técnicos, encontramos que se muestra claramente la desigualdad social y económica que existe en México.

Muchas mujeres que trabajan o buscan empleo no logran superar la pobreza en la que viven junto a sus familias, particularmente en América Latina y el Caribe, África del Norte y Subsahariana, Asia Meridional y Medio Oriente.

HISTORIA DEL PORQUE EL 8 DE MARZO

¿Pero por qué el 8 de marzo es del día internacional de la Mujer? Porque el 8 de marzo de 1908, las trabajadoras de la empresa textil Cotton de Nueva York, se declararon en huelga para exigir mejores condiciones de trabajo, ocuparon la fábrica y, ante la negativa a desalojar el lugar, fueron atacadas con bombas incendiarias. 146 obreras murieron quemadas en el interior de la fábrica.

A partir de noviembre de 1908 las trabajadoras del sector textil protagonizaron numerosas huelgas en el este de Nueva York. 20 mil obreros, en su mayoría mujeres, paralizaron las fábricas a lo largo de trece semanas; sufriendo despidos, ataques de los esquiroles, hambre y más de 600 detenciones. Nada de esto las hizo flaquear y desde entonces estas mujeres se convirtieron en bandera de lucha para todos los que buscaban la igualdad de derechos.

Un año después, el 8 de marzo de 1909 se convocó una manifestación que reclamaba mejores condiciones de vida y de trabajo para las mujeres migrantes, la abolición del trabajo de los niños y el derecho de voto para las mujeres.

Pero fue la feminista alemana Clara Zetkin, quien en 1910, durante el II Congreso Nacional de Mujeres Socialistas celebrado en Copenhague, propuso que el día 8 de marzo fuera proclamado jornada de lucha para las mujeres trabajadoras de todo el mundo, en recuerdo del aniversario de la muerte de las 146 obreras de la fábrica textil de Nueva York.

De ahí la importancia de conmemorar este sábado 8 de marzo los cien años del trágico suceso histórico que culminó con la declaración del Día Internacional de la Mujer, para visibilizar, reflexionar y continuar con los esfuerzos que desde los cinco continentes se realizan.

El trayecto es largo y todavía queda mucho por andar. Hombres y mujeres aún no somos iguales. Lo gritan desde hace años los colectivos feministas y sólo hay que mirar las estadísticas:

- Las mujeres desempeñan las profesiones peor remuneradas, suelen tener empleos a tiempo parcial y ganan menos.

- Las mujeres cobran 8.8 menos que los hombres y tienen serias dificultades para conciliar vida familiar y profesional.

- Las mujeres directivas en México no rebasan el 10%% de la población activa.

- Dentro del alumnado universitario, las mujeres son mayoría y son más las que se licencian.

VIOLENCIA LABORAL: INEGI

La violencia laboral más frecuente es la que tiene que ver con hechos de discriminación laboral; por cada 100

mujeres trabajadoras, 24 declararon haber sufrido inequidades de salario con respecto al hombre para un

mismo nivel, petición de prueba de embarazo, menores oportunidades de ascenso, despidos o disminución del salario por embarazarse, por su edad o estado civil.

En tanto, 12 de cada 100 declararon haber padecido acoso laboral o sexual (humillaciones, insinuaciones o propuestas sexuales, menosprecio, manoseos, agresiones físicas, relaciones sexuales obligadas y represalias por no haber accedido).

La prevalecía de esta modalidad de violencia se observa más entre las mujeres de 25 a 39 años de edad, en particular entre las de 35 a 39 años, de ellas poco más de un tercio declaró haber sufrido hechos de violencia en el ámbito laboral.