FALTA DE EMPLEO, ORIGEN DE FRANELEROS

Por Regina Vargas

Hay un grupo de personas que trabajan en el desorden, sin ningún tipo de reglas, pululan en grandes avenidas, centros comerciales o zonas de gran afluencia vehicular, y aparecen como por arte de magia, ellos, son los “franeleros” o llamados “viene viene”.

Su origen esta relacionado con el desempleo, los bajos salarios, la poca preparación, la falta de oportunidades, eso orilla a este ejército de desempleados a tomar las calles ante la complacencia de las autoridades.

Además, no les interesa trabajar en una fábrica por un salario mínimo, checar, cumplir horarios y tener responsabilidades.

Nadie sabe cuantos son porque no existe un censo confiable para saber de donde vienen y quienes son y que autoridad les permite apropiarse de la vía pública. A este tipo de actividad también se suman los valet parking.

Demetrio Sánchez, “franelero” de la colonia del Valle, nos platica que gana más de 300 pesos diarios, más las lavadas, de las cuales cobra 30 pesos por carro. “No tiene ningún tipo de prestación, pero ni le importa, puesto que gana mucho más que un profesionista”, comenta en broma.

En entrevista, el diputado local perredista, Tomás Pliego recordó que estas personas, trabajan en el desorden, sin ningún tipo de reglas, violan la ley, los ordenamientos jurídicos y generan fricciones con la ciudadanía.

Desde su punto de vista, está ligado al desempleo, “cuando la gente no tiene trabajo, no hay opciones, posibilidades, salen a la calle a cuidar coches, o bien la lavarlos., dijo.

Hacen doble fila en las avenidas, como es el caso de Santa Fe, colonia del Valle, Polanco, Anzures, y casi toda la ciudad ante la presencia de patrullas, y con total impunidad hacen de las calles estacionamientos públicos.

Buscan lugares donde hay empresas, oficinas y establecimientos mercantiles.

Otro caso también se observa en otros rumbos de la ciudad, pues la reducida capacidad de los cuatro estacionamientos en la Segunda Sección del Bosque de Chapultepec beneficia a más de 50 franeleros que operan en esa zona.

Los cuidacoches informales imponen a los paseantes una cuota fija de 30 pesos por cada automóvil estacionado en la vía pública e incluso por los que acomodan en áreas verdes o sobre las banquetas.

En el caso de los alrededores del Hospital La Raza, los viene viene también han sentado sus reales y ahí la cuota es de 20 pesos por carro.

En la San Rafael, por la zona de las escuelas, el franelero cobra mínimo 10 pesos. El colmo es en la colonia Condesa, donde la cuota para el “viene viene” es de 20 pesos, y los viernes por la noche, llega hasta 50.

El caso general es que toda esta gente instalada en las calles de manera ilegal viola la Ley de Justicia Cívica del Distrito Federal, comentó Tomás Pliego.

En la Segunda Sección de frente a La Feria, y dos más cerca del Museo de Historia Natural, los viene viene cobran a 30 pesos por tiempo libre.

Igualmente, se han apropiado de la banqueta sobre Avenida Constituyentes y ahí estacionan los automóviles, y las grúas de la Policía capitalina toleran esta violación al Reglamento de Tránsito y no retiran los vehículos.

Estos se apropian de los espacios con conos de vialidad o cubetas y llegan a colocar letreros con la tarifa que cobran como si la vía pública fuera un área de estacionamiento de cobro.

Concepción Luna, habitante de la colonia San Miguel Chapultepec comentó que desde hace tiempo diputados locales solicitaron al Secretario de Seguridad Publica del DF, Joel Ortega, actuar contra franeleros y comerciantes ambulantes, que ponen en riesgo la integridad física y el tránsito seguro de peatones por las banquetas de la capital.

Los franeleros, lamentó, se apoderan de la calles para convertirlas en estacionamientos públicos violando Ley de Cultura Cívica y en el Reglamento.

"Los franeleros se pusieron groseros, llamé a la policía, pero no los encontró. La sorpresa me la llevé yo cuando salí de la librería y encontré las llantas ponchadas, me habían robado los espejos y la antena", relató.

La Ley de Cultura Cívica del Distrito Federal indica: Artículo 24.

Son infracciones contra la tranquilidad de las personas:

I. Prestar algún servicio sin que les sea solicitado y coaccionar de cualquier manera a quien lo reciba para obtener un pago por el mismo. La presentación del infractor sólo procederá por queja previa.

 Artículo 25.

Son infracciones contra la seguridad ciudadana:

II. Impedir o estorbar de cualquier forma el uso de la vía pública, la libertad de tránsito o de acción de las personas, siempre que no exista permiso ni causa justificada para ello...

Artículo 33.

Cuando el infractor acredite de manera fehaciente su identidad y domicilio podrá solicitar al juez le sea permitido realizar actividades de apoyo a la comunidad a efecto de no cubrir la multa o el arresto que se le hubiere impuesto, excepto en los casos de reincidencia.

Artículo 49.

El juez notificará de manera personal e inmediata la resolución al presunto infractor y al quejoso si estuviera presente.