Asunto explosivo y lamentable
TRABAJADORES QUE ARRIESGAN SU VIDA
Por: Martín Esparza Flores*
La creciente violación a los derechos laborales, la falta de democracia
en las organizaciones gremiales, la perpetuidad de seudo- dirigentes corruptos
y el infame olvido de las autoridades hacia diversos sectores de la clase
obrera, son sólo algunos rasgos que caracterizan el mundo laboral
de nuestro país.
La trágica explosión en la mina Pasta de Conchos, en San
Juan de sabinas, Coahuila, ocurrida el 19 de febrero pasado, evidencia
las carencias y los riesgos de muerte en los cuales día con día
los compañeros mineros arriesgan su vida.
Una explosión causada por altas concentraciones de gas ocasionó
derrumbes y dejó atrapados a 65 trabajadores en un túnel
a 160 metros de profundidad, pero al mismo tiempo dejó en la orfandad
más lastimosa a 65 familias mexicanas que algunos llaman "homicidio
industrial".
Es evidente que este drama destapa escandalosamente una serie de condiciones
deplorables, injustas e inhumanas, con las cuales, tienen que vivir los
trabajadores de las minas, sumadas a la baja calidad de vida y miserables
salarios, y en el nulo respeto a sus derechos. Y es que los empresarios
aún tienen la equivocada idea de que los obreros somos ciudadanos
de segunda categoría, de ahí la desigualdad social y económica
que enfrentamos sea cada vez más grave e inocultable. Un ejemplo
vergonzoso de esta situación es el hecho de que un minero de la
mina Pasta de Conchos recibe en promedio un sueldo de 130 pesos diarios,
a todas luces inadmisible frente al altísimo riesgo que implica
su tarea; el grupo México -encargado de contratar la mano de obra-
paga salarios todavía más bajos a los llamados "contratistas",
que son trabajadores no sindicalizados y quienes no tienen las prestaciones
de ley ni seguridad laboral. De este modo tampoco, el consorcio paga una
cuota mayor sindical para desplazar a trabajadores sindicalizados a fin
de de emplear mineros irregulares con menor salario, atropello denunciado
en su oportunidad por el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros y
Metalúrgicos.
El tema de los trabajadores que en México desempeñan su
labor en condiciones de alto riesgo incluye también a los compañeros
del sector energético, como son los miembros del Sindicato Mexicano
de Electricistas (SME). Por ejemplo nuestra organización registra
un promedio de 658 accidentes de trabajo al año donde las áreas
de mayor riesgo son talleres, distribución y comercialización
(líneas aéreas, cables subterráneos) y construcción.
Esta situación de riesgo exige, indudablemente, asumir la parte
de responsabilidad que a cada uno corresponde: gobierno, empresas y sindicatos
debemos esforzarnos por exigir y unificar el cumplimiento de la legislación
y normatividad correspondiente a las condiciones en materia de seguridad
e higiene, para el mejor desempeño de nuestras labores.
Ningún discurso burocrático ni una indemnización
económica aliviarán la pena de muerte de un trabajador.
No podemos permitir que el gobierno foxista ni algún otro sector
o actor social atente contra el sindicalismo democrático mexicano.
Los errores y negligencias tienen un costo, por ello esperamos que se
llegue hasta las últimas consecuencias en el caso del accidente
minero.
Desde el SME exigimos se realice una investigación a fondo para
deslinadar responsabilidades y evitar que tragedias como la vivida en
Coahuila vuelvan a suceder. Reiteramos nuestra solidaridad y apoyo incondicional
a los trabajadores mineros y sus familiares que sepan hoy más que
nunca que no están solos.
*Secretario General del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME)
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