Advierten Opositores

RADICALIZARAN ACCIONES VS LÍDER PETROLERO

Por Regina Vargas

Disidentes del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) aseguran que no se van a quedar con los brazos cruzados y le advierten que si el dirigente de esa organización, Carlos Romero Deschamps, no deja el cargo esta semana 'tomaremos acciones en las que no se descarta que haya sangre'.

'Este señor que quiere es que corra sangre, y ante la inconformidad de más de 90 mil trabajadores podría haber un estallido social', alertaron.

En entrevista con FRECUENCIA LABORAL, Omar Toledo Aburto, uno de los petroleros disidentes que protagonizó la toma del sindicato petrolero, el viernes pasado, insistió que ya es tiempo que Romero Deschamps deje al STRPM, pues la base trabajadora ya no lo quiere, pues fue impuesto para un periodo más y se ha enriquecido a costa de los petroleros.

“Irregularmente Romero se ha impuesto por un cuarto periodo más como secretario general”, resaltó.

En ese sentido, instó, a que deje el cargo en el que ha permanecido con la tolerancia del secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, “quien le otorgó la toma de nota sabiendo que es un delincuente que ha desfalcado por más de 60 mil millones de pesos en complicidad con autoridades de Petróleos Mexicanos a favor de él y de sus incondicionales”.

Toledo Aburto, insistió que Carlos Romero se ha enriquecido a costa de los trabajadores y del presupuesto federal y nadie hace algo por meterlo a la cárcel, por lo que dijo que el grupo que dirige no claudicará hasta que se haga justicia.

Urge poner freno a la actuación de Romero Deschamps y una ola fuerte de despidos que aseguró está en puerta y en la que se prevé salgan unos 32 mil trabajadores.

De ahí que aseguró que “ya empezaron con 3 mil en la sección 44 de Villahermosa”. Esta situación no puede tolerarse más porque este señor lo que quiere es que corra sangre y ante la inconformidad de más de 90 mil trabajadores puede haber hasta un estallido social”.

Finalmente, dijo que casi 95 mil trabajadores están contra Romero Deschamps, pero no se han manifestado abiertamente debido al terrorismo sindical que ha instrumentado.