Año 3. No.182. del 18 al 24 de abril 2009.

PÁGINA SOLIDARIA

En Solidaridad con Cooperativistas del Diario Excélsior Publicamos Textualmente:

Representantes legalmente constituidos de los consejos de Administración y Vigilancia de Excélsior, Compañía Editorial S.C. de R.L., Rafael de la Huerta Reyes, Alfredo Jiménez Ramos, Porfirio Azpetia Santiago.

México, DF, jueves 16 de abril del 2009

Boletín de Prensa

Llegó el momento de romper el silencio en espera de justicia y por el bien de la comunicación y el buen periodismo en México. Después de más de ocho años de lucha por la defensa del periódico Excélsior, Compañía Editorial, S. C. de R. L., sus auténticos propietarios serán llamados a “oír sentencia”, de acuerdo con la promoción 4207 que dictará en breve el Juez Segundo de Distrito en Materia Civil, licenciado J. Refugio Ortega Marín.

Los cooperativistas esperan, como en anteriores juicios, la sentencia resulte nuevamente favorable.

El juicio ordinario mercantil 88-2006, cuya demanda inicial formularon trabajadores del que fuera “El Periódico de la Vida Nacional ”, llega a sus etapas finales cuando, el secretario del juzgado, licenciado Raúl Aurelio Servín García, deberá citar a las partes a la audiencia ordenada por el administrador de justicia.

Cabe expresar que los demandantes, representados por Porfirio Azpetia Santiago, presentaron pruebas ante el juzgador donde se demuestra la ilegalidad de la convocatoria, asamblea y acuerdos, entre ellos la operación de compraventa del notario, pactado con trampas y mala fe, el 23 de enero de 2006.

En esa fecha, los socios de la cooperativa Excélsior, aún vigente, fueron despojados de su patrimonio y del periódico que un día colocaron, dirigido por el periodista Julio Scherer García, como uno de los diez mejores del mundo.

Simplemente, los propietarios del diario fueron lanzados a la calle por grupos de choque, guardias de seguridad y personal del supuesto comprador.

Según las “promesas” hechas por Olegario Vázquez Raña a quienes “compró” el periódico, “todos serían recontratados”. Sin embargo, el mismo día de la operación fraudulenta de compra-venta, Vázquez Raña mandó cerrar las entradas de la cooperativa tanto en avenida Reforma como en las calles de Bucareli y Donato Guerra con personal privado de seguridad y sólo dejó entrar a unos cuantos trabajadores de talleres a quienes, obviamente días y meses después, despidió injustificadamente.

Cabe recordar que dicho empresario había tratado de comprar el rotativo en el año 2000, al depuesto director Regino Díaz Redondo, quien en su oportunidad fe acusado de prostituir la línea editorial del diario y entregarlo al entonces partido en el gobierno, el PRI.

Díaz Redondo pretendía vender el periódico a espaldas de sus legítimos propietarios por lo que fue expulsado de la cooperativa mediante asamblea legal y acusado penalmente. Sin embargo, un numeroso grupo de simpatizantes y golpeadores permanecieron en la cooperativa para obstruir y entorpecer el trabajo de la administración legalmente constituida encabezada por de la Huerta Reyes , y utilizando un sinnúmero de acciones ilegales lanzaron a la calle de forma violenta a De la Huerta , colaboradores y cooperativistas seguidores quienes intentaban rescatar el diario como tal y a la cooperativa como patrimonio de cientos de familias de periodistas y socios cooperativistas por siempre.

Concientes del objetivo que tiene un medio de comunicación administrado por una entidad del sector social de la producción como es el caso de la cooperativa Excélsior, los socios cooperativistas y periodistas encabezados por Rafael de la Huerta han resistido durante más de ocho años demandas, pleitos internos, agresiones, traición de abogados (que durante el proceso se hicieron millonarios a costa de los “defensores de la cooperativa”). Durante este tiempo, el empresario ha usufructuado maquinaria, nombre, edificios y archivos que supuestamente “compró de buena fe” al grupo de vendedores (hoy demandados) cuya legalidad está en entredicho y que en breve resolverá el juez Ortega Marín.

Los presidentes de los consejos de Administración y Vigilancia de Excélsior, Compañía Editorial, S. C. de R. L., Rafael de la Huerta Reyes y Alfredo Jiménez Ramos respectivamente, quienes han conducido y apoyado ampliamente a los demandantes representados en el juicio por Azpetia Santiago, afirman que una vez conocida la resolución definitiva del juzgador, se emprenderá otro tipo de acusaciones de corte penal contra quienes en forma ilegal dispusieron de los dineros de la cooperativa y los repartieron en forma discrecional, sin tener facultad para ello.

Hay información precisa que sitúa a los vendedores Javier de Anda Herrera y Armando Heredia Suárez, así como a otros involucrados, en presunción de delitos como administración fraudulenta entre otros.

Por lo que hace a la supuesta buena fe del comprador, hay documentos que prueban lo contrario, como l hecho que, antes de decidir si se vendía o no, Vázquez Raña, De Anda y Heredia, ya habían signado un contrato de venta en el Registro Público de la Propiedad.

Además, antes que los socios y propietarios decidieran vender, existían cheques elaborados, cartas de renuncia, liquidaciones hechas al arbitrio personal de quienes entregaron las instalaciones al engañado “comprador de buena fe” el multicitado Olegario Vázquez Raña, hoy sedicente propietario de Excélsior y de un canal de televisión, así como de diversas estaciones de radio desde donde hacen alarde de un periodismo el cual no le es natural y que adjudican contratar mercenarios de la comunicación que hoy infestan el medio periodístico.

Año 3. No.182. del 18 al 24 de abril 2009.