En el Último Sexenio

DESPIDIERON A 60% DE EMPLEADOS DE NAFIN

Por María de Lourdes Martínez González

El 60 por ciento de los empleados de Nacional Financiera perdió su empleo durante la actual administración, y ahora las autoridades pretenden reducir el contrato colectivo de trabajo de quienes se mantienen activos, al nivel que han caído las prestaciones de los empleados de la banca privada.

El director de Nacional Financiera (NAFIN), Mario Laborín, reconoció que la reestructuración de esta banca gubernamental, provocó que la planta de trabajadores se redujera de 2 mil 700 empleados de base que tenía a 970 solamente.

El ejecutivo participó en el foro "Banca de Desarrollo: Situación Actual y Perspectivas", en donde anunció su intención de modificar el contrato colectivo de trabajo, para nivelarlo a las condiciones que tienen los empleados de la banca privada.

Al respecto María Luisa Velásquez Galicia, secretaria general del Sindicato Unico de Trabajadores de Nacional Financiera, replicó que los trabajadores de la banca privada perdieron casi todas sus prestaciones en los últimos años, por lo cual los empleados de la banca de desarrollo se opondrán al recorte de su contrato colectivo.

"Vamos a esperar el proyecto y a ver las condiciones y de acuerdo con ese proyecto...porque ningún sindicato, que se diga sindicato, puede aceptar la pérdida de las condiciones ganadas", agregó.

Dijo que el sindicato que encabeza estaría dispuesto a buscar soluciones para fortalecer a esa institución gubernamental "pero ninguna que vaya en detrimento de los trabajadores".

En el foro que organizó la Comisión de Desarrollo Regional de la Cámara de Senadores, también estuvieron presentes ex trabajadores pensionados y jubilados del Banco de México, del Banco Nacional de Comercio Exterior y de la propia Nafin.

Los integrantes del auditorio eran miembros de los sindicatos de estos bancos gubernamentales o de organizaciones de jubilados y pensionados, quienes demostraron conocer el tema.

Replicaban o directamente cuestionaban a los ponentes e interrumpían su participación con críticas y gritos, cuando los expositores decían algo que contrariaba a quienes escuchaban. Incluso hubo un momento en que algunas personas extendieron mantas de protesta por las políticas financieras antisociales del gobierno federal.

Uno de los puntos que generó reacciones en contra fue cuando el director de Nacional Financiera, Mario Laborín, anunció el recorte de personal en esta banca de desarrollo y sostuvo que el pago de las pensiones y jubilaciones de mil 440 ex trabajadores, reporta un déficit de 4 mil millones de pesos.

Por su parte el ex director del Banco de Comercio Exterior, Carlos Philllips Olmedo, afirmó que uno de los retos de la banca de desarrollo es generar empleo remunerado adecuadamente, combatir la desigualdad y la pobreza, así como fomentar el desarrollo productivo.

En tanto que el diputado federal Francisco Suárez Dávila, en su ponencia sostuvo que durante el actual sexenio se ha desmantelado a la banca de desarrollo, misma que dejó de otorgar financiamientos a las micro y pequeñas empresas, para dar apoyo indebidamente a transnacionales comerciales como Wal Mart.

El legislador reconoció que Nafin ha basado su operación en el recorte de personal.