Sorpréndase

DENUNCIAS PENALES POR PROTESTAS LABORALES

Por María de Lourdes Martínez González

El presupuesto para educación indígena es derrochado en la compra de materiales y alquiler de edificios administrativos, aseguraron trabajadores de la Dirección General de Educación Indígena (DGEI), quienes fueron denunciados penalmente por protestar por reclamar sus derechos.

Los nuevos maestros que salen al campo mexicano a educar a los indígenas, no estudiaron la carrera ni cubren el perfil mínimo de capacitación, comentó María Isabel Robledo.

"La gente que está saliendo al campo tiene perfiles de secundaria y preparatoria incompleta, a los maestros no les hacen caso, al paso en que vamos la DGEI se está convirtiendo en un elefante blanco, porque no se hace nada y lo que se hace sirve para justificar el presupuesto".

A esto se suma que el presupuesto para la educación indígena se gasta en pagos de inmuebles caros y en mal estado, en la compra de libros que no se distribuyen o que tampoco cubren los requisitos de calidad y en rubros no prioritarios.

Y ¡SORPRÉNDASE!, los empleados que protestaron por esta causa y por su inseguridad laboral, ya que trabajan en un edificio averiado, fueron denunciados penalmente.

"Como resultado de esta petición ahora las autoridades nos están levantando actas calumniándonos de que hemos actuado violentamente contra ellos, cuando ningún compañero los ha tocado", explicó Blanca Lozano.

Actualmente hay 22 empleados de la Dirección General de Educación Indígena procesados judicialmente.

"Con una serie de calumnias nos levantaron las actas el coordinador administrativo y su pseudo abogado, también está un compañero al que presionan para correrlo, por eso nos estamos manifestando", subrayó Norma Torres.

Estos trabajadores cumplieron dos años con su movimiento de protesta, que inició por sus temores de sufrir daños físicos, por las cuarteaduras del edificio donde trabajan.