Con el pretexto del COVID anulan la educación pública

LAS TELECLASES MARGINAN A 5 MILLONES DE NIÑOS CON DISCAPACIDAD Y EN POBREZA

*Es una gran simulación porque en comunidades indígenas y semiurbanas no hay clases.

*Los pequeños dicen que se aburren y que no aprenden.

*La CNTE aboga por las clases presenciales con medidas preventivas.

Participación del profesor Pedro Hernández,

director de escuela primaria y secretario general de la-sección 9 SNTE democrática,

afiliado a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE)

en el programa Frecuencia Laboral del 9 de enero de 2020,

Transcripción de María de Lourdes Martínez, en colaboración voluntaria,

Publicación Original del Portal www.frecuencialaboral.com

P.- ¿cuál es la evaluación de las teleclases en el año 2020?

Soy director de la escuela primaria “Centauro del Norte”, en la alcaldía Iztapalapa en la Ciudad de México y nosotros como colectivo docente desde el inicio de la emergencia sanitaria y con la suspensión de clases, en marzo de 2020, planteamos la necesidad de elaborar una estrategia ante el cierre de escuelas prácticamente en todo el mundo.

Desde un principio las autoridades de la Secretaría de Educación Pública dieron palos de ciego, al no tener claridad de cuál sería la estrategia o la forma en que se iban a continuar las clases y, finalmente, impulsó una estrategia que se llama “Aprende en Casa I” y II, ahora la amenaza es que continuamos a partir del 11 de enero de 2021, con el “Aprende en Casa III”. Aunque durante las primeras dos semanas van a hacer una retransmisión del programa, le llaman de reforzamiento.

Hemos platicado con los maestros entre el jueves y viernes pasado (7 y 8 de enero de 2021), como consejo técnico, y hemos pensado que cada colectivo docente emprenda las actividades con sus estudiantes y retome con los padres de familia estrategias que hemos compartido en distintos espacios.

Seguimos insistiendo en que la televisión no puede sustituir al maestro y sentimos que esto se ha convertido en una gran simulación.

En un mensaje que dio en días pasado el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán - quien no termina de irse, porque ya fue nombrado embajador de México en Estados Unidos y en su lugar fue designada la maestra Delfina Gómez desde el 21 de diciembre de 2020, se despide una y otra vez, en espera de la ratificación de su nuevo nombramiento por el Senado de la República- nos dijo que 30 millones de estudiantes de los distintos niveles han continuado su educación.

Dio algunas cifras que resultan contradictorias, por ejemplo, señala que 22 millones de estudiantes aprenden por televisión. Nosotros cuestionamos fuertemente esta parte, porque dice que 8.5 millones lo hacen en televisión abierta y 7.5 millones lo hacen en televisión de paga.

El secretario de Educación se sorprende de que sea en los lugares más pobres donde se siguen los programas de teleclases en la televisión de paga. Nosotros decimos que, no es ninguna paradoja, eso ocurre porque la televisión abierta no llega a todos los rincones del país a los lugares más pobres. Efectivamente hay muchísimas comunidades pobres en donde están pagando por tomar clases.

Esto demuestra que la educación en México ya no es gratuita. Los maestros como modernos esclavos, tenemos que pagar nuestro internet y poner nuestros dispositivos personales. Yo pongo como ejemplo que el recibo de energía eléctrica en mi casa llegó muy alto, por esta situación de teletrabajo de los maestros.

La Secretaría de Educación Pública no está proporcionando estas herramientas de trabajo y promete que hasta dentro de 2 años todas las escuelas tendrán internet, lo cual demuestra que nos encontramos en una situación de mucha desigualdad.

Nosotras esperamos que a partir de la próxima semana los maestros retomemos de manera profesional y comprometida el vínculo con los estudiantes y localizar a quienes no se han reconectado.

Hay como una ola de burlas en el siberespacio con memes en los que se ríen de que los estudiantes estén en clases virtuales, pero no han comido o su mamá no tiene para pagar de internet. Es un panorama difícil.

Los trabajadores de la educación y, especialmente, los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), continuaremos en esta batalla en defensa de la educación pública y por una educación alternativa y emancipadora para los pueblos.

P.- ¿Usted cree que con el pretexto del Covid-19 se pretenda acabar con la educación pública en México? Ya parece cotorreo, cada que se va a vencer el plazo de la cuarentena y, ahora, del semáforo naranja o rojo, nos anuncian que se prolonga y dijeron que el 10 de enero era el plazo de vencimiento del semáforo rojo, pero lo volvieron a prorrogar.

Sí, inclusive el propio secretario de Educaciójn-embajador, dijo en uno de esos mensajes que ha sido tan exitoso el “Aprende en Casa”, que ya se lo pidieron en Guatemala y El Salvador y organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial lo han aplaudido como exitoso. De plano dice que con esta emergencia sanitaria se entró de lleno a la era digital, que llegó para quedarse, lo cual significa que en los próximos años vamos a estar en un sistema educativo híbrido con clases presenciales ya a distancia (por internet, televisión, radio).

Nosotros decimos que, efectivamente, ahora contamos con nuevas tecnologías, pero debido a la pérdida de empleo en más de 3.6 millones de trabajadores, y la caída del poder adquisitivo, la pobreza que se ha incrementado en México, millones tienen que buscar el sustento diario y están marginados de ese desarrollo. Pareciera entonces que los maestros y las escuelas somos prescindibles.

Nosotros seguiremos defendiendo el carácter público de la educación y la necesidad de las clases presenciales, pero como han señalado los maestros del Estado de Chiapas, que por decreto se pretendía que reiniciaran clases presenciales este lunes 11 de enero de 2020, mientras no se resuelvan los problemas de falta de agua y de jabón, la carencia de gel, cubrebocas y la imposibilidad de sana distancia debido a las aulas saturadas, no hay condiciones, no lo vemos factible. En la situación de México tampoco. Necesitamos hablar de esta situación con el secretario de Educación.

P.- Maestro nos decía que todo pinta para seguir prolongando las teleclases, pero nosotros hemos hecho entrevistas a jóvenes que dicen que no están aprendiendo con este método.

R.- Es que la televisión emite mensajes, puede entretener, informar, pero no educar en el sentido profundo que se da cuando hay una relación alumno-maestros. El papel del maestro se vuelve fundamental, porque los niños se quejan de que se aburren y que en la tele no hay en dónde preguntarle al maestro, porque se transmiten clases pregrabadas que no permiten una interacción y, eso se agudiza, porque no llega la señal a todas las regiones del país.

La evaluación que hacemos es que se ha hecho una gran simulación, porque el secretario de Educación habla de que hay 30 millones de alumnos que se están educando con la televisión, pero los maestros nos señalan que en comunidades indígenas y semiurbanas no hay clases porque no hay internet ni luz o no hay dinero para pagarlo.

Además de que hay un universo de millones de niños y jóvenes que requieren educación especial, alrededor de 5 millones de mexicanos, que están quedando fuera de esta estrategia porque no se adapta a sus necesidades.

P.- Esto me parece delicado porque ni los peores gobiernos neoliberales se atrevieron a eliminar las escuelas y con este gobierno de la Cuarta Transformación se está haciendo la eliminación de escuelas.

R.- Señalamos que también hay muchos pendientes, la nueva secretaria de Eduación tendrá una agenda muy apretada. Con el presidente teníamos agendada una reunión con la dirección política nacional y el presidente de la República en diciembre pasado, pero por el semáforo rojo la suspendieron, igual que la del 6 de enero de 2021 que nuevamente la suspendieron. Nosotros vamos a evaluar qué hacer.

Si bien ya se empezó a legislar sobre el teletrabajo para darle derechos a los teletrabajadores de empresas, no se aplica para los trabajadores de gobierno federal y los gobiernos locales, como somos los maestros, por lo que vamos a delinear una estrategia para defender nuestros derechos.