TRABAJADORES FRENTE AL PODER LEGISLATIVO

Por Carlos Guillén S.
Secretario de Prensa del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Nuclear y colaborador voluntario de Frecuencia Laboral

Publicación Original del Portal www.frecuencialaboral.com

El Senado de la República ratificó por unanimidad el Convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 20 de septiembre de 2018. Ese tratado es relativo a la libertad sindical y derecho de contratación colectiva adoptado por ese organismo internacional en julio de 1949, que fue una de las demandas del Encuentro Nacional de Dirigentes Sindicales, Campesinos y de la Sociedad Civil, que se entregaron a una representación plural de la Cámara de Senadores unos días antes.

A pesar de que la ratificación había sido demandada por numerosas organizaciones desde hace tiempo y que el Senado recibió hace tres años la iniciativa correspondiente, no fue sino hasta que el proceso electoral del primero de julio modificó la composición del poder legislativo, que se dio la ratificación, a tres semanas de entrar en funciones la actual legislatura.

Este convenio establece que los trabajadores deberán gozar de adecuada protección contra todo acto de discriminación tendiente a menoscabar la libertad sindical en relación con su empleo, como condicionar el empleo a la condición de que no se afilie a un sindicato o a la de dejar de ser miembro de un sindicato.

También establece que no debe haber injerencia del patrón para fomentar la constitución de organizaciones de trabajadores bajo el control de los patrones y que se deben fomentar las condiciones para estimular la negociación para reglamentar, por medio de contratos colectivos, las condiciones de empleo.

Se trata, en pocas palabras, de dar a los trabajadores la libertad para formar los sindicatos que ellos mismos decidan y evitar el contratismo de protección, consistente en la firma de contratos a espaldas de los trabajadores con el fin de favorecer a los patrones.

Pocos días antes de la ratificación del convenio por el Senado, el Encuentro Nacional de Dirigentes Sindicales, Campesinos y de la Sociedad Civil, entregaron a una representación plural de la Cámara de Senadores, el documento con la agenda legislativa acordado por consenso por las organizaciones participantes para pedir al poder legislativo que escuche y atienda las propuestas de los trabajadores.

Uno de los puntos incluidos en la agenda como parte del tema modernización y democratización del mundo del trabajo fue precisamente la ratificación de los convenios 98 y 189 de la OIT.

Los temas de la agenda presentada a la Cámara de Senadores, son los siguientes:

Reforma social del estado. Defensa de los Derechos Humanos y Combate a la impunidad. Cambio del modelo económico. Modernización y democratización del mundo del trabajo. Rescate del campo. Educación pública, ciencia y tecnología. Derecho universal a la salud y rescate de la seguridad social. Política aeronáutica de estado. Telecomunicaciones y agenda digital. Soberanía energética. Política exterior. Conservación y fortalecimiento de la educación y cultura. Economía social y solidaria, cooperativismo, banca de desarrollo y banca social. Medio ambiente.

Para cada caso, se establecieron los objetivos buscados y se enumeraron las propuestas correspondientes. El documento fue firmado por el Encuentro Nacional de Dirigentes de las Organizaciones Sindicales, Campesinas y de la Sociedad Civil.

Esta semana, en la Convención del Sindicato de Telefonistas, Luisa María Alcalde, la secretaria de trabajo propuesta para el gobierno que inicia el 1° de diciembre señaló como un objetivo suyo saldar las enormes deudas con el mundo del trabajo.

Dijo que la libertad, democracia y transparencia en el mundo sindical, la recuperación de la figura del salario mínimo, garantizar los derechos y obligaciones establecidos en la ley federal del trabajo que no se han cumplido y terminar con los abusos en la subcontratación y con la costumbre de inscribir a los trabajadores en el IMSS son algunos de sus objetivos.  

Para lograrlos, ofreció iniciar ya el diálogo y establecer una alianza "entre todos los que queremos transformar este país". No lo vamos a lograr si no es de la mano de todos ustedes dijo a los telefonistas, acompañados de sindicatos integrantes de la UNT y del Sindicato Mexicano de Electricistas.

Presentes en el acto, los senadores Martí Batres y José Narro también señalaron que estarán del lado de los trabajadores. El senador Batres dijo que no llegaban con las manos vacías, pues la firma del Convenio 98 era un compromiso ya cumplido.

A un mes de instalada la nueva legislatura y dos meses antes de la toma de posesión del nuevo gobierno, la ratificación del convenio 98 es un avance. Sin embargo es apenas un punto. Existen muchas demandas de los trabajadores sin resolver y en la agenda entregada al senado por el gran frente que agrupa a las principales organizaciones sindicales, campesinas y sociales hay muchas propuestas.

No hay que olvidar que los patrones, sus organizaciones y lo que queda de sus partidos van a oponerse a cualquier medida real que afecte el control que han tenido desde siempre, como ya lo intentaron al tratar de evitar la ratificación del convenio 98.

Es claro que las propuestas deben acompañar las protestas y que éste fue un buen inicio. Pero la organización y la lucha de los trabajadores son indispensables si se busca un cambio real. Ningún discurso ni la mejor intención sustituyen la organización de los trabajadores.

Por lo pronto, ya se prepara un mitin para entregar a la Cámara de Diputados la agenda legislativa elaborada por las organizaciones sindicales, campesinas y sociales.

sutin.nucleares@gmail.com