Objetivo: Exterminar a los Sindicatos

EL GOBIERNO IMPONE UNA POLÍTICA ANTISINDAL

El gobierno mexicano aplica toda su fuerza para aniquilar al sindicalismo, al punto en que alienta a las empresas a ya no contratar directamente trabajadores con tal de que no haya creación de sindicatos en México, advirtió el diputado federal por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y líder telefonista del Francisco Hernández Juárez, durante el foro “La CRISIS Y EL TRABAJO EN AMÉRICA DEL NORTE”, que organizó en la Cámara de Diputados.

Comentó que incluso las maquiladoras utilizan el método sofisticado de instalarse con materiales prefabricados, para el momento en que se conforme un sindicato, llevarse hasta los baños portátiles y no dejar rastro de su presencia en México, para evitar el pago de derechos laborales a los mexicanos. Todo con la venia de las autoridades federales.

"Creo que han llegado el extremo de que para que no haya sindicatos es mejor que no haya trabajadores...y nos desaparecen virtualmente, como es el caso de los empleados de Banco Azteca, que cuando llevaron los documentos con las firmas de todos los trabajadores que querían formar su sindicato la empresa respondió que ninguno de ellos estaba contratado. Unicamente el gerente general estaba registrado como trabajador y los demás habían sido empleados a través de una outsourcing (empresa contratista de mano de obra).

Cuando se firmó el Tratado de Libre Comercio (en 1993), los trabajadores en México tenían la opinión de que ese acuerdo comercial iba a provocar que los empresarios extranjeros inviertieran en el país, no para mejorar las condiciones laborales, sino para aprovechar los bajos salarios, para tener mano de obra barata. Y también porque podían venir a explotar a los trabajadores sin respetar las leyes laborales ni los derechos sindicales".

En el foro que se realizó el jueves 03 de diciembre del 2009, Francisco Hernández Juárez, señaló que estas políticas antisindicales no son exclusivas de México, sino también se detectan en Estados Unidos y en todo el mundo, provocandose un retroceso en el avance de la humanidad y en el respeto a los derechos de los trabajadores.

Detalló que en 1982 cuando arrancaron las políticas neoliberales en México, con un salario mínimo en México se compraban 54 kilos de tortillas. Actualmente con ese ingreso solamente se compran 5 kilos de tortillas, lo cual demuestra el impacto negativo de la política de restricción salarial.

Dijo que el colmo de las políticas antisindicales es que en la propia Cámara de Diputados se negaban dejar pasar a los trabajadores que iban como auditorio al foro “La CRISIS Y EL TRABAJO EN AMÉRICA DEL NORTE”, en el que participaron representantes sindicales de Estados Unidos y Canada.

"Es el colmo que a la casa del pueblo no pueda pasar el pueblo", lamentó el dirigente telefonista y diputado federal.

Hernández Juárez hizo notar que los observadores interancionales de la política antisindical mexicana se admiran de que los trabajadores en México tengan tanta capacidad de tolerencia ante los embates que han sufrido en sus derechos.

"Me decían algunos dirigentes de otros países que literalmente ya nos quitaron el salario, porque nos encontramos entre los países con los niveles más bajos en ingreso...nos quitaron las prestaciones, nos quitaron la jubilación, en el caso del Sindicato Mexicano de Electricistas ya ni siquiera guardaron las formas, les quitan el contrato colectivo, les cierra la empresa y los corren...así que los observadores internacionales piensan que somos demasiado pasivos".

Señaló que desde su perspectiva el problema entre los trabajadores mexicanos es que no tienen representación sindical, ya no estan organizados en sindicatos "y sin sindicatos no hay nada qué hacer, el trabajador está absolutamente vulnerable e indefenso, porque sin sindicato no es posible equilibrar la fuerza con las autoridades y la empresa, ni equilibrar las condiciones económicas, ni el salario".

Hizo incapié en que si los trabajadores no rompen el enorme control que tiene el gobierno sobre el mundo del trabajo, siempre estarán en desventaja ante los despidos, los bajos salarios, las prestaciones, las jubilaciones.

"A los trabajadores mexicanos que más nos pueden quitar...y sin embargo ni los empresarios ni el gobierno frenan sus embestidas".