En Tabasco

IRREGULARIDADES EN ELECCIONES PETROLERAS

*Denuncian Violaciones a Derechos Laborales

Por Regina Vargas

El Comité de Observadores Independientes exhibió las diversas irregularidades y violaciones detectadas en las secciones 29 y 50 petroleras de Tabasco, durante las elecciones de octubre pasado, donde se violaron los derechos humanos laborales de más 5 mil trabajadores de Petróleos Mexicanos.

Entre las irregularidades sobresale que no se respetó el acuerdo de partes, no se publicó la convocatoria en tiempo y forma, se negó proselitismo en los centros de trabajo, en condiciones de igualdad, a las diferentes planillas contendientes, lo que muestra que esa situación priva en las 36 secciones del sindicato petrolero.

Faltó verificación de quórum, el presidente de debate no fue elegido por votación, la elección fue por aclamación, sin que se contara el número de votantes; los demás funcionarios no fueron reelectos, la elección no se realizó en el domicilio social; la asamblea se dio bajo presiones y expulsión de los trabajadores que se pronunciaron en contra del proceso.

En conferencia de prensa, el ex presidente de los derechos Humanos del DF,  Emilio Álvarez Icaza; el abogado Manuel Fuentes Muñiz, Enrique González Ruiz y el representante del Cereal, Manuel Padrón, manifestaron que las violaciones documentadas son un desafío a las autoridades laborales del país.

Álvarez Icaza sostuvo que se debe analizar la votación a mano alzada, debido a que en muchos sindicatos hay represalias e intimidación por ejercer ese derecho.

Manuel Padrón explicó que la observación fue solicitada por la Alianza Nacional Democrática de Trabajadores Petroleros, a 24 organizaciones civiles (de derechos humanos, sindicales, ecológicas y eclesiales), a través de miembros del Movimiento Obrerista Petrolero de Evolución Democrática, de la Sección 50 (de Paraíso, Tabasco, con 3,500 trabajadores activos registrados) y del Movimiento Obrerista Democrático de Acción Petrolera (MODAP), de la Sección 29 (de Comalcalco, Tabasco, con una plantilla de 1,650 petroleros).

Fuentes Muñiz manifestó que se negó proselitismo en los centros de trabajo en condiciones de igualdad, hubo compra y coacción del voto, se registraron agresiones y negación de registro a planillas opositoras, y se registró una actuación parcial de la administración de Petróleos Mexicanos a favor de las planillas oficiales.

Entre otras irregularidades también citó que en ese proceso electoral denotó una falta absoluta de democracia y equidad, ya que se negó el cumplimiento de los derechos humanos elementales: elegir libremente a los representantes sindicales en condiciones de igualdad y equidad.

Álvarez Icaza manifestó que dichas elecciones se transformaron en un proceso intimidatorio, con chantajes y humillaciones, para los trabajadores que se vieron obligados a asistir.

Dijo que debido  a las agresiones en contra del COI y de periodistas, se consideró que no existían garantías mínimas de seguridad para llevar a cabo una observación electoral directa en la fase de elección.

Concluyeron que por la cantidad de violaciones documentadas a los ordenamientos legales, la justicia laboral debe declarar la nulidad de las elecciones y reponer el proceso electoral, de manera que apegue a las condiciones establecidas por la legislación nacional e internacional.