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Debido al austero presupuesto público HABRÁ MÁS DESEMPLEO Y RETROCESO ECONÓMICO EN 2020: CAM-UNAM*La economía sigue su marcha para atrás. *El PIB cayó -0.2% en julio-septiembre de 2019 respecto a un año antes: INEGI *Tendrá efecto carambola la contracción presupuestal, mermará el ingreso público y obligará a nuevos recortes. *Los criterios y lineamientos presupuestales siguieron la ruta neoliberal del recorte al gasto. *Para crecer económicamente un país debe gastar en inversión productiva.
Por María de Lourdes Martínez González Periodistas y Conductora de Frecuencia Laboral Publicación Original del Portal www.frecuencialaboral.com El desempleo en México para el año 2020 aumentará cerca del 22 por ciento en el sector público, mientras que en el sector privado será de alrededor del 8 por ciento y no habrá crecimiento económico, el Producto Interno Bruto seguirá cayendo y llegará a menos de cero, debido a las restricciones de gasto para el fomento productivo agropecuario e industrial y al recorte en distintas áreas del gobierno e instituciones autónomas, que se impusieron en el presupuesto del próximo año, advirtió el Doctor en Economía, David Lozano Tovar. El investigador y catedrático de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) dijo en entrevista con Frecuencia Laboral: El Espacio donde de los trabajadores son la noticia, el sábado 23 de noviembre de 2019, que la tendencia de la economía nacional seguirá a la baja, lo cual tendrá un efecto carambola, pues afectará negativamente la recaudación de ingresos, provocará mayor reducción del gasto público y más recortes presupuestales, lo que a su vez generará desempleo. El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), confirmó lo dicho por el Doctor Lozano, dos días después de esta entrevista. En su reporte del 25 de noviembre de 2019, destacó que el Producto Interno Bruto (PIB) “tuvo un descenso real de (-)0.2% en el tercer trimestre del año actual con relación al mismo lapso de 2018”. En el tercer trimestre de 2019 el PIB tuvo casi cero crecimiento, al llegar apenas a 0.1%, cifra igual al segundo trimestre de este año. En tanto que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) fue de apenas 0.3% en términos reales, pero en relación al mismo mes del año pasado registró una caída real de (-)0.3% . “Desde hace meses habíamos estado observando la tendencia negativa del Producto Interno Bruto (PIB) -que es el indicador de toda la riqueza económica nacional que se produce- por lo cual señalábamos que iba a afectar el gasto público y la recaudación de recursos del gobierno federal. Con esta tendencia de caída del Producto Interno Bruto a finales de 2019, para 2020 esperamos que se presente un decrecimiento del Producto Interno Bruto que llegará a menos de cero por ciento”, agregó El PIB es indicador de la prosperidad o la inactividad y pobreza de la economía de una nación. En México ha bajado cada trimestre en 2019, en relación a un año antes, de acuerdo a los reportes del INEGI. Eso afecta al gobierno federal en términos de manejo de recursos, sin embargo en la propuesta de presupuesto para 2020 "lo que más llama la atención es que con la caída del Producto Interno Bruto todos los programas de fomento productivo para el campo sufrieron un recorte de 13 por ciento y en el caso de la industria hay un recorte de casi 8 por ciento”, indicó el doctor Lozano Tovar. Eso se convierte en un círculo vicioso, porque va a impedir el crecimiento del PIB, debido a que no va a haber gran actividad económica y a su vez va a reducir todavía más el ingreso para el gobierno federal. En el reporte del INEGI del 25 de noviembre de 2019, que se refiere a julio-septiembre de este año, se destaca que el Producto Interno Bruto tuvo un descenso real de (-)0.2% en el tercer trimestre del año actual con relación al mismo lapso de 2018, que en las actividades Secundarias retrocedió (-)1.5% en igual periodo. Con actividades secundarias se refiere al sector industrial, que es donde se recortó gasto para 2020, pese a que para su reactivación se requiere aumentar el presupuesto. El INEGI señala en su reporte del tercer trimestre de 2019, que el PIB anual de las Actividades Primarias creció 5.4% y el de las Terciarias 0.1%, para dar un resultado global l decreciente respecto a 2018 de ‘0.2%. “Esta propuesta de presupuesto 2020, además de reducir el Producto Interno Bruto (PIB) va a afectar el bienestar social, porque si bien los recursos presupuestales para gastos en programas sociales (ayuda monetaria directa a viejitos, a jóvenes, a mujeres, a minusválidos y a otros sectores) se mantuvo con las mismas características y condiciones que en el año 2015, el único y gran problema es que eso no genera crecimiento de la economía y tampoco nuevos empleos ni mejores salarios, que es lo que hace prosperar a un país”. Otro factor que tomó en cuenta para su análisis el Doctor en Economía David Lozano Tovar, es el precio del petróleo, porque de ello depende una parte importante del ingreso del gobierno y existe la amenaza de una reducción en el precio internacional del barril del crudo. “El gobierno manejó la información de que se mantendrá entre 45 y 65 dólares el precio del barril, sin embargo en el mundo hay varios indicadores de que esa tarifa puede bajar. La Organización de Estados Petroleros (OPEP) va a aumentar la producción de petróleo, porque tienen problemas de ingresos algunos países petroleros y requieren de recursos ante la recesión mundial y eso va a afectar a México, porque nuestros ingresos por petróleo se van a reducir más. P. ¿Qué efectos va a tener para la generación de empleos todo esto? R. Si no tenemos recursos eso va a afectar la a la generación de empleos. El gobierno federal pensaba que para generar para 2019 un millón y medio de empleos, pero solamente se llegaron a crear 700 mil. Con la reducción del Producto Interno Bruto, el cálculo para 2020 es que solamente se creen 300 mil empleos. Pero ante los recortes presupuestales que se dieron en varios rubros productivos como el campo y las manufacturas que se llaman no amplias -que sirven para la elaboración de otros productos- es posible haya un crecimiento considerable del desempleo. En caso del sector gubernamental el desempleo va a aumentar cerca del 22 por ciento, en el sector privado puede crecer el desempleo cerca del 8 por ciento, en 2020. El desempleo en el gobierno va a ser mayor en 2020 por la reducción de personal, pero también porque se asignaron bajos recursos presupuestales para la creación de nuevas plazas. Por ejemplo, en el caso del sector educativo se aprobaron 650 millones de pesos para la generación de empleo, pero eso no es nada, porque servirá sólo para crear 500 o 600 plazas de trabajo, cuando en el sector educativo hay una demanda anual de cerca de 17 mil o 22 mil plazas. Por eso el próximo año el problema del desempleo va a ocupar los titulares de los noticiarios. P. ¿Por qué entonces el gobierno federal se empeña en hacer estos presupuestos de egresos que no reactivan a la economía nacional ni a la generación de empleo? R. El problema es que el gobierno federal y sus titulares no son economistas y quienes quedaron a cargo de la Secretaría de Economía y las áreas económicas estratégicas tienen todavía la misma visión que tenían los zedillistas ( se refiere a quienes dominaron durante el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León entre 1994-2000, que eran economista de tendencia neoliberal n.d.e.) y ese manejo pragmático del presupuesto nos trajo muchos problemas en el país, durante más de 10 años reducción. Aplicar ahora las mismas medidas de recorte presupuestal y reducción del gasto público en aras de mantener la estabilidad macroeconómica, no permitirá hacer nada. Cualquier economista sabe que reactivar la economía implica gastar, o sea el Estado tiene que gastar para activar la economía. Si no gastas como gobierno difícilmente habrá incremento del PIB y difícilmente se van a activar otras áreas económicas. La mayoría de los países del mundo lo que están haciendo es gastar para activar su economía. El gobierno federal mexicano ha planteado que el presupuesto está diseñado para no endeudarse, pero sólo atiende el problema de la deuda anterior y desde hace más de 25 años no se endeudan para la reactivación de la economía y tener tasas crecientes del PIB. Hay que pensar seriamente qué mecanismos vamos a hacer para la reactivación del Producto Interno Bruto, o por lo menos tener tasas crecientes pequeñas pero reales. Para muchos la pregunta es ¿en dónde está la promesa de que íbamos a crecer los tres primeros años a tasas de entre 3 y 4 por ciento del PIB? P. Entonces ¿siguen imperando las ideas de los neoliberales para el cálculo, asignación y gasto del presupuesto público? R. Pues sí. Me daba risa cuando en el debate presupuestal escuchaba a los diputados afines al gobierno decir que se estaba aprobando un presupuesto antineoliberal, porque eso no es cierto. Los diputados son bastante ignorantes. Los presupuestos no son neoliberales ni comunistas ni lo que sea. Los presupuestos son restrictivos, contraen el gasto público, o son no restrictivos, es decir alientan el gasto. Los lineamientos que están utilizando para el uso del presupuesto esos sí son neoliberales. Cuando los diputados decían que estaban aprobando un presupuesto que no eran neoliberal, eso no es cierto, porque si bien se dieron a algunos programas un poco más de presupuesto no superaron el gasto social que se autorizaba en los años 1980. Si comparamos el presupuesto 1981 con el de 2020 en gasto social, estamos por debajo 10 por ciento, desde entonces se disminuyó el crecimiento de la economía y la crisis se esta gastando menos. Y el problema es que se considera que un pequeño aumento en algún rubro es hacer un gran cambio en el rumbo de la política económica, pero no es así. Tendrían que porque habría que subir el presupuesto en gasto social a lo que había en 1981, para que realmente haya un cambio. Otro punto es que l a reducción del PIB en el campo puede generar inflación de precios. “No sólo tiene efectos negativos para los productores agropecuarios, sino también para el consumidor, porque hay que recordarle al auditorio que cuando el PIB tiene menor crecimiento al 2 por ciento, casi siempre eso tiene efectos en el incremento de los precios, porque hay menos producción, pero se mantiene la demanda de consumo. Eso provoca en el mercado la aplicación de la ley de la oferta y la demanda: a mayor demanda y menor producción o menor existencia del producto que se desea adquirir, se encarecen los precios de bienes e insumos para la producción y para el consumo. Lo cual puede disparar la inflación para algunos sectores de la economía la inflación.
Por su parte la doctora Josefina Morales, integrante del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM y representante en México de la Sociedad Latinoamericana de Pensamiento Crítico, explicó en el programa Frecuencia Laboral que el gasto del presupuesto público se mantuvo en alrededor del 20 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), pero es austero y urge reorientar gasto para priorizar la inversión productiva en el campo y en la industria. “Se prioriza el gasto en seguridad, bienestar, infraestructura en PEMEX…pero en general es un gasto austero…necesitamos mayor orientación del gasto hacia la inversión, necesitamos incrementarla de manera significativa, la inversión privada es raquítica y la inversión pública con todo el neoliberalismo cayó, estrepitosamente, Hay otros sectores abandonados, como el campo porque garantizar el precio de garantía no es suficiente, necesitamos examinar seriamente este presupuesto y garantizar que se ejerza a tiempo y que se logre recuperar el crecimiento. Por ejemplo de PEMEX se empieza a recuperar la producción de petróleo no aumenta la exportación, se va a incrementar la producción de gasolina pero todo es muy incipiente, hay incremento en la educación pero se mantiene el presupuesto que es insuficiente, estamos ante una situación económica crítica, Tenemos crecimiento muy precario, desigual en regiones y sectores y necesitamos reorientación profunda en gasto pública. El presupuesto público 2020 sigue priorizando el pago de la deuda, son compromisos brutales, pero si empezamos por analizar la deuda de los Estados empezaríamos por recuperar ciertos gastos y terminar con el pago del Fobaproa, se ha aprobado la cancelación del perdón de impuestos para que realmente se tengan ingresos para la inversión productiva en México”.
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