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Año 14. No. 764. del 07 al 20 septiembre 2020
Premio de Comunicación Alternativa

 

Reconoció el secretario de Hacienda que 2021 será el peor año

EL CRACK ECONÓMICO-FINANCIERO Y SOCIAL DE MÉXICO DURARÁ AÑOS: CAM-UNAM

*Urgen medidas económicas del gobierno y no discursos morales.

*Se acabaron los recursos petroleros con los que se combatía a la pobreza.

*Los trabajadores deben plantearse ¿qué hacer? ya que el gobierno no hace propuestas.

*COVID-19 pretexto para justificar lo que no se hizo para combatir la crisis económica.

 

Transcripción de la participación de David Lozano Tovar,

Doctor en Economía, catedrático e investigador de la Facultad de Economía

y coordinador del Centro de Análisis Multidisciplinario

de la Universidad Nacional Autónoma de México (CAM-UNAM),

programa Frecuencia Laboral del sábado 05 de septiembre de 2020,

Publicación Original del Portal www.frecuencialaboral.com

La crisis económica que hizo el secretario de Hacienda el lunes 31 de agosto de 2020 de reconocer que el 2021 va a ser peor año económico que en 2019 y 2020 juntos, entonces estamos previendo que el país no va a crecer el 2.5 por ciento que mencionó el presidente Andrés Manuel López Obrador, es posible que la economía siga decreciendo y que ni siquiera lleguemos a 1 por ciento.

Con ese escenario de ese tipo es obvio que las condiciones laborales y contractuales de los trabajadores se van a mermar muchísimo más. No podemos hablar de combate a la pobreza ni de una mejora en los programas de apoyo a la pobración, cuando el gobierno reconoce que ya se acabó el “guardadito”.

El guardadito del gobierno era lo de la venta del petróleo, pero con lo que pasó durante los primeros cuatro meses de 2020 con la caída en los precios internacionales del petróleo, dejó sin dinero para el próximo año y medio al Estado Mexicano y el gobierno no tiene los ingresos suficientes de la venta de petróleo –a pesar de que ya subió a 40 dólares por barril- porque ya se le pasó el tiempo para hacer frente a sus necesidades económica de 2021.

P.- El presidente Andrés López Obrador empezó su discurso de 2do. Informe de Gobierno, el 1 de septiembre de 2020, diciendo que con el combate a la corrupción y la moralización va a abatir la crisis económica ¿es posible eso?

R.- No se puede combatir un problema económico con una perspectiva moral, eso sucedió hace 300 años porque algunos economistas decían que los problemas de pobreza, de crecimiento y empleo se atacaban con buenas intenciones, pero en la realidad eso no le da de comer a la gente ni hace que pague la luz o el teléfono, mucho menos en plena pandemia de COVID-19, cuando los papás no están gastando en libretas o cuadernos sino en equipamiento técnico para que sus hijos puedan tener educación con teleclases y clases digitales.

Eso no se combate con deseos morales de "portémonos todos bien", eso funciona en una iglesia.

Si el gobierno actual considera que es su manera de combatir la situación económica del país, está en su derecho, pero eso no garantiza ninguna condición de mejora del desempleo y de ingresos.

La responsabilidad de reactivar la economía es del gobierno federal, pero con la declaración que hizo el lunes el secretario de Hacienda, el lunes 31 de agosto de 2020, de que el año 2021 será peor que éste, que va a ser el peor año en los últimos 4 sexenios, significa que es el peor sexenio que de los últimos 20 años.

La pandemia es un pretexto para justificar lo que no se hizo para combatir la crisis económica.

Lo que sí debe hacer la población y los trabajadores es pensar bien ¿de qué van a sobrevivir? Pues ya lo dijo el secretario de Hacienda, que va a ser un peor año que en 1932.

Si el gobierno no plantea qué hacer, cada trabajador debe hacerlo.

R.- Sobre el desempleo, la secretaría de Hacienda y el Banco de México, reconocieron ya que hay 12.5 millones que se quedaron sin empleo tras la medida sanitaria de "#QuédateEnCasa"

R.-A dos años del actual gobierno, más allá del problema del coronavirus, el decrecimiento de la economía no posibilitó la generación de empleos que necesita el país, que son 4 y medio millones de plazas de trabajo. Aunque las autoridades hacendarias reconozcan que hay 12.5 millones de desempleados, en realidad son 17 millones y medios, porque hay muchos de los micros y pequeños negocios que no necesariamente están en el sector formal.

Hay 5 millones de desempleados que estaban ayudándose en el sector informal.

 

 

 

 
   
 
 

 

 
 
 
 
 
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