53 AÑOS DEL SUTIN

Por Carlos Guillén Soriano,

Secretario de Prensa del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Nuclear,

Colaborador Voluntario de Frecuencia Laboral,

Publicación Original del Portal www.frecuencialaboral.com

El sindicato de los trabajadores nucleares mexicanos cumple 53 años y en este marco realizará su congreso.

El 8 de septiembre de 1964 nació el sindicato Único de Trabajadores de la Comisión Nacional de Energía Nuclear. Con el tiempo, por los cambios en la legislación que rige la vida de los organismos mexicanos responsables de la energía nuclear o por decisiones político sindicales de los trabajadores nucleares, ha cambiado el nombre del sindicato surgido hace 53 años, hasta llegar a ser en la actualidad el Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Nuclear (SUTIN).

Actualmente, el SUTIN agrupa a los trabajadores administrativos, técnicos, manuales, profesionales e investigadores de las ciencias y tecnologías nucleares, que prestan sus servicios en el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares. Es integrante de la Unión Nacional de Trabajadores, en cuya Comisión Nacional Ejecutiva ocupa la Vicepresidencia de Actas y Acuerdos, y de la Coordinadora Nacional de Sindicatos Universitarios, de Educación Superior, Investigación y Cultura, donde es integrante de la Comisión Política.

Del 4 al 8 de septiembre de 2017, se realizará el 25° Congreso Nacional Ordinario del SUTIN en un momento particularmente difícil para los trabajadores. Las llamadas reformas estructurales implementadas por el gobierno en los años recientes, han representado para los trabajadores mexicanos graves retrocesos de las conquistas y derechos alcanzados en décadas de lucha, principalmente en el empleo, el salario, la salud y la seguridad social, que sufren un constante deterioro a causa de estas reformas.

La organización de los trabajadores también ha resentido los efectos de estas políticas, pues para implementarlas, el gobierno y los patrones pusieron en marcha desde hace años una campaña para desaparecer, o al menos neutralizar, la organización independiente de los trabajadores, tratando de eliminar cualquier oposición a los objetivos fijados por el gran capital. Esta campaña, contó con el decidido impulso de los dueños de los medios masivos de difusión, desde donde se ha insistido en desprestigiar todo tipo de organización sindical, mientras no coincida con sus muy particulares intereses.

En especial, los trabajadores del conocimiento, los que prestan sus servicios en instituciones de educación, investigación y cultura, se han visto afectados por las políticas dominantes, a causa del desinterés gubernamental en estos campos, lo que ha llevado a un deterioro constante de sus instituciones. El presupuesto para este tipo de instituciones, no solo ha estado prácticamente estancado desde hace lustros, sino que en muchos casos ha disminuido y cuando se aplican recortes al gasto público, resulta ser de los primeros afectados.

Esta situación se expresa en las instalaciones inadecuadas, infraestructura obsoleta, falta de recursos para laboratorios, talleres y bibliotecas y un acelerado envejecimiento de la plantilla laboral, pues a las precarias condiciones para la jubilación de los trabajadores, se suma la casi nula contratación de personal. Esto además, no solo lleva a que el personal en activo sea de mayor edad, sino que se pone en riesgo experiencia y líneas de investigación, por la falta de personal joven que dé continuidad a los trabajos que se realizan en estas instituciones.

En el caso particular de los trabajadores afiliados al SUTIN, la ausencia de definiciones claras en el uso de la energía nuclear para la generación de electricidad y las carencias presupuestales, el insuficiente apoyo al uso de las aplicaciones de la energía nuclear en salud, cuidado del ambiente e industria, sumado al desconocimiento social de la realidad de la energía nuclear, representan problemas que el SUTIN debe enfrentar.

En un terreno más amplio, la unidad del sindicalismo democrático, el cambio de rumbo de la política gubernamental, la alianza obrero campesina y en general, la transformación del país, están entre las tareas de los trabajadores nucleares.

El Congreso del SUTIN que se realizará del 4 al 8 de septiembre en la sede del sindicato, en Viaducto Río Becerra 139, Col. Nápoles, buscará contribuir en la búsqueda de soluciones y en el cumplimiento de las tareas de los trabajadores, para hacer realidad el lema de este sindicato:

Por la Unidad Proletaria